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domingo, 29 de septiembre de 2013

Los Titanes

En la mitología griega, los titanes (masculino) y titánides (femenino) eran una raza de poderosos dioses que gobernaron durante la legendaria edad de oro.

Los titanes fueron doce desde su primera aparición literaria, en la Teogonía de Hesíodo; aunque en su Biblioteca mitológica, Apolodoro añade una decimotercera: Dione, desdoblamiento de la titánide Tea.

Los titanes estaban relacionados con diversos conceptos primordiales, algunos de los cuales simplemente se extrapolaban de sus nombres: el océano y la fructífera tierra, el Sol y la Luna, la memoria y la ley natural. Los doce titanes de la primera generación fueron liderados por el más joven, Cronos, quien derrocó a su padre Urano ("Cielo") a instancia de su madre, Gea ("Tierra").

Posteriormente los titanes engendraron una segunda generación, destacando los hijos de Hiperión (Helios, eso y Selene), las hijas de Ceo (Leto y Asteria) y los hijos de Jápeto (Prometeo, Epimeteo, Atlas y Menecio).

Los titanes precedieron a los doce dioses olímpicos, quienes, guiados por Zeus, terminaron derrocándolos en la titanomaquia (“guerra de los titanes”).  La mayoría de ellos fueron entonces encarcelados en el Tártaro, la región más profunda del inframundo.

En la Teogonía de Hesíodo los doce titanes siguen a los Hecatónquiros y los Cíclopes como grupo de hijos menores de Urano y Gea. Cronos Temeroso de que pudieran destronarle, Urano mantenía a todos sus hijos atrapados en el Tártaro. Como castigo, Gea envió a su hijo Crono, el menor de ellos, a atacar a su padre. Lo castró con una hoz adamantina y liberó así al resto de las entrañas de la Tierra, proclamándose rey de los titanes junto a su hermana Rea como esposa y reina.

Ambos engendraron una nueva generación de dioses, pero Crono, temiendo también que algún día lo derrocasen como él había hecho, se los tragaba enteros apenas nacían. Resentida por ello, Rea logró esconder a su sexto y último hijo, Zeus, entregándole en su lugar a Crono una roca envuelta en pañales que tragó confiado. El pequeño fue enviado a Creta, protegido por los guerreros Curetes y amamantado por la cabra Amaltea.

Cuando Zeus llegó a la edad adulta sometió a Crono por la astucia más que por la fuerza, dándole a beber un emético preparado con la ayuda de su abuela Gea que le hizo vomitar a sus hermanos. Comenzó entonces una guerra entre los dioses más jóvenes y los mayores, en la que Zeus fue auxiliado por los Hecatónquiros, los Gigantes y los Cíclopes, quienes una vez más habían sido liberados tras su nuevo encarcelamiento por Crono. Zeus venció tras una larga batalla y encerró a los Titanes que se le habían enfrentado en el Tártaro.

Los que no se habían opuesto a él siguieron teniendo de forma más o menos directa un papel en el nuevo orden: Océano continuó circundando el mundo, el nombre de la ‘brillante’ Febe fue empleado como sobrenombre de Artemis y añadido como epíteto de Apolo («Apolo Febo»), Mnemósine alumbró a las Musas, Temis siguió encarnando el concepto de ‘ley de la naturaleza’ y Metis fue madre de Atenea.

Hesíodo no tiene sin embargo la última palabra sobre los titanes. Algunos de los fragmentos que se conservan de la poesía órfica en particular guardan algunas variaciones del mito.

En un texto órfico, Zeus no se limitó a atacar a su padre con violencia. En su lugar, Rea preparó un banquete para Cronos, y éste se emborrachó con miel fermentada. En lugar de encerrarlo en el Tártaro, Crono fue arrastrado (todavía borracho) a la cueva de Nix, donde siguió durmiendo y vaticinando por toda la eternidad.
Otro mito acerca de los titanes no mencionado por Hesíodo gira en torno a Dioniso. En un momento determinado de su reinado, Zeus decidió ceder el trono en favor del infante Dioniso, que como Zeus a su edad era protegido por los Curetes. Los titanes decidieron matar al niño y reclamar el trono para ellos: se pintaron las caras de blanco con yeso, distrajeron a Dioniso con juguetes, y entonces lo despedazaron, y cocieron y asaron sus miembros, dándose un festín con ellos, mientras que de la sangre de la víctima nacía un granado. Zeus, enfurecido, castigó a los titanes fulminándolos con sus rayos. Atenea guardaba el corazón del niño en un muñeco de yeso, a partir del cual Zeus hizo a un nuevo Dioniso. Esta historia es narrada por los poetas Calímaco y Nono, que llaman a este Dioniso “Zagreo”, y también en cierto número de textos órficos, en los que no se usa tal nombre.

Una variación de esta historia, recogida por el filósofo neoplatónico Olimpiodoro, ya en la era cristiana, dice que la humanidad surgió del humo grasiento que despedían los cadáveres de los titanes al arder, muertos por el rayo de Zeus. Otros escritores anteriores insinúan por el contrario que la humanidad nació de la sangre derramada por los titanes en su guerra contra los Olímpicos.

Píndaro, Platón y Opiano se referían sin pensárselo dos veces a la «naturaleza titánica» del hombre. Que esto se refiera a algún tipo de «pecado original» enraizado en el asesinato de Dioniso sigue siendo objeto de acalorado debate por parte de los mitógrafos.

La primera generación de titanes son los hijos de Urano y Gea, está formada por:

Titanes:
  • Océano, el río que circundaba el mundo.
  • Ceo, titán de la inteligencia.
  • Crío, dios de los rebaños y las manadas, esposo de Euribia (hija de Ponto) y padre de Palas.
  • Hiperión, el fuego astral.
  • Jápeto, esposo de la oceánide Clímene y padre de Prometeo, ancestro de la raza humana.
  • Cronos, el más joven, que destronó a Urano y fue rey de los dioses.

Titánides:
  • Febe, la de la corona de oro.
  • Mnemósine, personificación de la memoria y madre de las Musas con Zeus.
  • Rea, reina de los dioses con Crono.
  • Temis, encarnación del orden divino, las leyes y las costumbres, y madre de las Horas y las Moiras con Zeus.
  • Tetis, diosa del mar.
  • Tea, diosa de la vista.

Algunos autores consideran también parte de esta generación a Dione, si bien otros la consideran una oceánide.

El matrimonio entre hermanos era corriente en la mitología griega, y varios titanes y titánides se unieron, engendrando una segunda generación de titanes:

  • Océano y Tetis engendraron las ninfas Oceánides, los ríos (Oceánidas) y manantiales.
  • Hiperión y Tea a Helios (el sol), Selene (la luna) y Eos (la aurora).
  • Ceo y Febe a dos hijas, Leto y Asteria.
  • Cronos y Rea formaron la pareja más importante, pues fueron los reyes de los dioses, y tuvieron seis hijos:
  1. Hestia, diosa del hogar.
  2. Hera, diosa de la fidelidad y el matrimonio, reina del Olimpo.
  3. Hades, dios del inframundo.
  4. Deméter, diosa de la agricultura.
  5. Poseidón, dios de los océanos.
  6. Zeus, dios supremo, rey de todos los dioses del Olimpo.
La segunda generación, por extensión, se conoce también con el nombre de titanes a algunos de los descendientes de los de primera generación:
  • Asteria, hija de Ceo y Febe.
  • Astrea, diosa de la justicia, predecesora de Dice.
  • Astreo, padre de los vientos y las estrellas errantes.
  • Atlas, castigado a sostener sobre sus hombros con los pilares que mantenían la tierra separada de los cielos.
  • Eos, la aurora.
  • Eósforo, la estrella de la mañana y de la tarde (Venus).
  • Epimeteo, hermano de Prometeo, progenitores de la humanidad.
  • Helios, el sol.
  • Leto, madre de Apolo y Artemisa.
  • Menecio, hijo de Jápeto y Asia.
  • Palas, dios de la sabiduría.
  • Perses, hijo de Crío y Euribia.
  • Prometeo, el amigo de los mortales y creador de la humanidad (junto con Epimeteo) robó el fuego de los dioses para dárselo a los hombres.
  • Selene, diosa de la luna.
  • Titán, hermano de Helios y dios (quizá) del calendario anual.

Otros mienmbros de la segunda generación no suelen ser llamados titanes:
  • Caanto, hermano de Melia.
  • Dione y Metis, que se suelen considerar oceánides.
  • Los Oceánidas o dioses-río.
  • Las Oceánides, ninfas marinas.
  • Pico, rey del Lacio.
  • Quirón, el centauro.
  • Los hijos de Cronos: Hestia, Hera, Hades, Deméter, Poseidón y Zeus.

Y por último la Generación Incierta, que son algunos titanes de los que no se sabe a qué generación pertenecen: 
  • Ánito, uno de los que criaron a la Señora, hija de Deméter.
  • Lelanto, padre con la oceánide Peribea de Aura, una cazadora frigia.
  • Titanis, considerada por algunos madre de Temis.

Ya en el siglo XX, algunos investigadores prominentemente Jane Ellen Harrison han argumentado que un ritual iniciático o chamánico subyace en el desmembramiento y canibalismo que practican los titanes en mito de Dioniso. Harrison también señala que la palabra “Titán” procede del griego τιτανος, que significa “tierra blanca”, “arcilla” o “yeso”, y que los titanes eran ‘hombres de arcilla blanca’ u hombres cubiertos de arcilla blanca o polvo de yeso en sus rituales. El investigador M. L. West también señala lo mismo en relación a los ritos iniciáticos chamanes de las primitivas prácticas religiosas griegas.

Los titanes al igual que otros seres como los ogros, cíclopes, etc han sido muy utilizados y representados en cierto ámbitos culturales a lo largo de la historia como en la literatura, viedojuegos, animes japoneses, etc como por ejemplo:

  • Titanes en el World of Warcraft.
  • Películas como Wrath of the Titans (Furia de Titanes).
  • Los Jóvenes Titanes, grupo de superhéroes de la editorial DC Cómcs.
  • Titán, personajes del manga y anime Saint Seiya.
  • Titan A.E., película futurista animada de ficción de 20th Century Fox.
  • Shingeki no Kyojin (Attack on Titan), anime de género shonen.
  • Titanes, personajes de ficción de Marvel Comics.
  • Titán, satélite natural del planeta Saturno.
  • Titanes del God of War.


Bueno espero que os haya gustado esta entrada.


 Muchas Gracias por vuestras visitas y Hasta la próxima ^^

Bye!


viernes, 27 de septiembre de 2013

Teke Teke

En la última entrada estuvimos viendo una leyenda urbana española, hoy os traigo de nuevo una leyenda urbana, pero esta vez de Japón. Por lo visto es una leyenda urbana muy popular en Japón entre los escolares, muchos profesores cuentan esta leyenda a sus estudiantes para asustarlos y que no vaguen por las calles a altas horas de la noche. 









Aquí os dejo la leyenda, espero que os guste.


Esta escalofriante leyenda habla de un espíritu femenino al que le falta la mitad inferior del cuerpo. Dicen que se arrastra con las manos (terminadas en dedos largos, con garras que pueden cortar carne como mantequilla) y que se desplaza haciendo un sonido del cual recibe su nombre: “Teke Teke”.

La versión más difundida cuenta que, en vida, aquel espectro era una joven mujer, que esperaba el tren pero cayó en las vías, no tuvo tiempo de escapar de una muerte horrenda en la que su cuerpo, fue partido en dos… Muy probablemente algunos la vieron caer y no la ayudaron, ya que el Teke Teke es un fantasma que arde en ira, buscando afanosamente compartir con cuantos pueda su amargo destino. Así, cuentan que ha empujado a personas que estaban esperando el tren, que ha atacado con sus garras dejando caras y espaldas sanguinolentas, o incluso, según los más extremistas, que es capaz de arrastrarte y lanzarte a las vías del tren o, si te la encuentras solo en alguna oscura noche, puede destrozarte y usar sus garras para dividir tu cuerpo en dos. Pero el asunto va aún mas lejos; pues, en cualquiera de los casos en que la víctima muere, la versión extrema de la leyenda afirma que se convierte en otro “teke teke” más…

¿Quizás víctima de una leyenda escolar muy pesada? Una de las teorías cuenta que el Teke Teke es el fantasma de una colegiala japonesa que vaga por las estaciones de tren en Japón. En vida era una chica asustadiza e impresionable, y eso la hacía blanco frecuente de bromas pesadas. Un día de verano (temporada de cigarras en Japón) esas bromas fueron demasiado lejos, y sus compañeros, viéndola que esperaba el tren con la mirada perdida, se acercaron sigilosamente por atrás y le lanzaron una cigarra en el hombro, haciéndola dar un brinco que la hizo terminar en las vias férreas, donde un veloz Shinkansen (tren de alta velocidad) la partió en dos. Desde ese día, ella pena cerca de las estaciones, buscando acabar con bromistas como los que la precipitaron a su muerte, aunque no duda en acabar con inocentes también…
La leyenda en si cuenta que un escolar fue asesinado por este fantasma, supuestamente la muerte fue real, y es ampliamente conocida entre los escolares japoneses. Trata sobre una víctima del fantasma y es como sigue:
Un estudiante de una escuela solo para hombres salió más tarde de lo debido, cuando de pronto, antes de que abandonara el colegio, escuchó un extraño ruido detrás de él. Inquietado, el muchacho se giró y vio que, observándolo desde una de las ventanas del segundo piso de un edificio lleno de aulas, estaba una hermosa chica de misterioso aspecto. Ella lo veía con los brazos apoyados en el alféizar y la cara entre las manos, él no podía ocultar el asombro que le producían aquellas dulces facciones y aquellos ojos negros, profundos y templados. ¿Qué hacía una chica así en un colegio de hombres? Él no lo sabía, y dejó de importarle cuando ella sonrió coqueta y maliciosamente, pero este no fue más que el principio del fin, porque tras un par de segundos ella saltó por la ventana y cayó al pavimento, sin destrozarse, y revelando que su cuerpo carecía de mitad inferior…

Congelado por el terror, el muchacho la vio arrastrarse con los brazos, haciendo un ruido que era como “tek, tek, tek, tek, tek”… Trató de gritar pero la voz no le salía, trató de salir corriendo pero sus piernas solo podían temblar y temblar… Ahora sabía que se trataba del Teke Teke, pero era demasiado tarde; y ella, que iba dejando una estela de sangre nacida de sus órganos expuestos, saltó violentamente sobre él, sacó una guadaña y lo cortó en dos, condenándolo con ello a ser otro “teke teke” más.
Kashima Reiko, es la leyenda hermana, es muy semejante a la leyenda del Teke Teke, es la leyenda de Kashima Reiko, una chica que también murió pisada por un tren, aunque no fue dividida en dos sino que simplemente perdió sus dos piernas. Desde entonces, dicen que ronda por los baños en busca de víctimas, que toca la puerta y pregunta al ocupante dónde están sus piernas. Kashima espera que la persona le diga que sus piernas están en la Estación Meishin, y que fue ella misma quien se lo dijo. Si la víctima responde indebidamente, Kashima le arrancará salvajemente sus propias piernas…

También se ha hecho un par de películas sobre esta leyenda japonesa, aquí os dejo los enlaces a los trailers. (Estan en japones dado que no los he encontrado ni en español ni subtitulados en español o ingles, lo siento)



Espero que os haya gustado esta entrada de hoy.


Muchas Gracias por vuestras visitas y Hasta la próxima ^^

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lunes, 23 de septiembre de 2013

La Santa Compaña

Hoy os voy ha hablar de una leyenda urbana muy común en España, esta es de las más conocidas y que ha llegado hasta nosotros, hoy día, mediante la tradición oral. Es una de las leyendas urbanas españolas más escalofriantes.

Aunque el lugar donde es más común esta leyenda y donde muchos dicen que han visto esta escalofriante procesión de muertos es en Galicia, también ha sido avistada en Asturias (aquí se les llama Güestia) y otros lugares del norte de España.

La Santa Compaña es básicamente una procesión de muertos, en la que va a la cabeza o "liderada" por un vivo que porta una cruz, este portador camina como si estuviera sonámbulo y no recuerda nada al día siguiente, aunque su vida se va consumiendo poco a poco por la compañía de los muertos. Sólo si encuentra a otro vivo capaz de ver a la Santa Compaña, y le entrega su cruz, se liberará de la maldición, que noche tras noche le obliga a liderar la comitiva de difuntos. Por otra parte los muertos en su mano llevan una vela o un cirio cada uno, cuando se encuentran a una persona que fallecerá dentro de poco le entregan su vela, si la persona la acepta morirá en un corto plazo de tiempo. En resumen esta procesión de muertos vagan por la noche reclamando el alma de los vivos.

Esta leyenda es la sigueinte:


Álvaro llevaba años sin poner los pies en el pueblecito de Galicia donde creció; pero, la grave enfermedad que sufría su padre, le obligó a desplazarse a la zona rural donde se crió para darle un último adiós. Por desgracia su padre tenía las horas contadas.
Angustiado por el ambiente familiar que había en la que antes fue su casa, decidió salir a pasear para despejarse un poco. No le importó que ya hubieran pasado las 2 de la madrugada, tenía que separarse de sus hermanos, unos insensibles que como parásitos ,y con su padre aún con vida, se repartían la herencia como hienas despedazan la carroña.

Distraído y con la mente en otro lado, caminaba por los abandonados caminos que llevaban a la ermita del pueblo, una pequeña iglesia que se cerró varios años atrás por el grave deterioro que había sufrido su tejado en una lluvia de granizo. La ermita antes era la última escala en la procesión del pueblo, que finalizaba llevando la imagen de un Cristo desde la Iglesia que había cerca de la plaza hasta allí. Pero cada vez eran menos los habitantes de la comarca y el pueblo parecía una fantasmagórica visión de lo que Álvaro recordaba de su niñez, por lo que la ermita nunca fue restaurada.

Cuando se encontraba a escasos metros del tramo final, escuchó una especie de cánticos, su curiosidad le llevó a acercarse aún más, pero algo en su interior le decía que debía esconderse. Un frío indescriptible parecía metérsele en los huesos y comenzó a sentir un fuerte olor a cera quemada.

Instintivamente decidió ocultarse tras unos arbustos para contemplar aterrado lo que parecía una romería fantasmal precedida por un hombre que con la cara demacrada portaba una cruz en la mano; los demás integrantes eran aún mucho más aterradores, pues claramente podía verse que ya estaban muertos y sus rostros eran poco más que unas calaveras que movían sus escalofriantes mandíbulas mientras entonaban un rosario. Todos los muertos portaban una vela en su mano y su lento paso parecía dirigirles directamente a la casa del padre de Álvaro.

Álvaro, tan asustado como intrigado, decidió seguir a distancia a la cadavérica procesión, que cada vez se acercaba más a la que fue su casa, el lugar donde sufría la agonía de una lenta enfermedad su padre. Hasta que sorprendentemente su padre apareció caminando y, sin mediar palabra, uno de los esqueletos envuelto en una túnica se le acercó y le ofreció una de las velas. Su padre, como hipnotizado, alargó la mano y la recogió, y tal y como había aparecido se esfumó en ese instante. El resto de integrantes de esa Santa Compaña también parecieron evaporarse en una extraña niebla. Todos menos el portador de la cruz, el primer integrante de la procesión de muertos que quedó tendido en el suelo durante unos segundos. Pasado ese tiempo se levantó, y con la cara totalmente descompuesta por el cansancio y como si su misma vida fuera gradualmente absorvida por la compañía de los muertos, como un sonámbulo comenzó a caminar en dirección al pueblo.


Álvaro estaba tan petrificado por el miedo que no podía moverse, sólo el grito desgarrador de una de sus hermanas le despertó del shock en el que se encontraba. Casi sin darse cuenta había caminado siguiendo a la Santa Compaña hasta escasos metros de la casa de su padre, y el grito confirmó sus más temidas sospechas: la procesión de muertos había venido a reclamar el alma de su padre.

Corrió tan rápido como pudo hasta la habitación donde yacía su padre ya sin vida, prácticamente toda la familia se encontraba con él en el momento que su alma abandonó su cuerpo, Álvaro entendió en ese momento que la imagen que vio de su padre no era más que su alma uniéndose a una Santa Compaña con la que vagaría eternamente reclamando el alma de otros moribundos.

Espero que os haya gustado esta nueva entrada.


Muchas Gracias por vuestras visitas y Os Espero en la próxima entrada ^^

Bye!




viernes, 20 de septiembre de 2013

Bastet

Hoy os traigo a otro de mis dioses egipcios favoritos, la diosa Bastet, esta diosa se representaba como una gata sentada o como una mujer con cabeza de gata, que en la mano lleva un sistro (instrumento musical parecido a un sonajero). Esta defendió a Ra, el dios-sol, de los ataques de la serpiente Apofis, deidad que personifica las fuerzas del mal en el más allá. Hija y esposa de Ra, Bastet representa la dulzura maternal y la feroz defensa de los hijos, así como el placer, la feminidad y la alegría, representaba la dulzura maternal  y era guardiana del hogar y feroz defensora de sus hijos. Además era la diosa de la música y la danza. También representaba la abundancia y era la señora del placer, poseyendo todos los aspectos pacíficos de diosas peligrosas como Sejmet. Era protectora de los gatos y, por lo tanto, enemiga de las serpientes, fundamentalmente de Apofis a la que ataca con sus garras protegiendo a su padre Atum. Originalmente simbolizaba la cálida fertilidad del sol, en oposición a Sejmet, que es el calor abrasador. Se la denominó "Señora del Este" y estaba relacionada con Sejmet, "Señora del Oeste", del Oeste", al igual que Nejbet y Uayjet eran las señoras del Norte y el Sur. Durante el Reino Nuevo se la hizo una diosa de la guerra y se le asociaba al sol. Se decía que era esposa e hija de Atum-Ra, o hija de Osiris e Isis; también se la considera la personificación del alma de Isis. Este último parentesco debe ser entendido en un ámbito fundamentalmente griego. Horus fue identificado con el dios griego Apollo y Bastet con su hermana Artemisa (Apollo y Artemisa eran hijos gemelos de Leto), y de ahi la relación de la diosa gata con Isis y Osiris, padres egipcios de Horus. El clero de Bubastis constituyó una tríada en la que Atum desempeñaba el papel de marido y Mihos, o un Horus local (Hor-Hekenu) el de hijo. Confundida con Sejmet, es la esposa de Ptah y madre del dios león Mihos. En su fusión con la diosa vengadora Sejmet se la saluda ocasionalmente como el ojo de Ra, el ojo vengador.  . 

También llamada Bubastis, este era el nombre de una ciudad del Delta, en la que ya aparecen restos de su culto en torno a la IV dinastía, por lo que quizás el nombre de esta ciudad se deba a la diosa. 

Representada como mujer con cabeza de gata, aunque anteriormente tuvo cabeza de leona, como se ve en el templo funerario de Niuserra.. En su aspecto guerrero, era una leona con la piel verde  y en este aspecto estaba asociada a la luz solar. Fue una diosa solar hasta la identificación de los griegos con su diosa lunar Artemisa. Fue a partir del siglo X a.C cuando adoptó caracteres hogareños y es entonces cuando comienza a aparecer como gata doméstica.

Confundida con Hathor era diosa de la música y la danza, llevaba un sistro; en la baja época se la representa también con pendientes de oro en las orejas y en la nariz; unas veces llevaba una égida, en la mano derecha y un sistro en la otra; cuando lleva el sistro y el anj se convierte en patrona de festivales, celebrados en abril y mayo, en los que era habitual emborracharse. Durante los festivales estaba prohibida la caza de leones para evitar su ira. En Bubastis, en el lado oriental del Delta, se celebraba una fiesta denominada de la embriaguez en la que se consumían grandes cantidades de vino, recordando que la diosa fue embriagada para aplacar su ira (en su asociación con Sejmet) En su templo había gatos sagrados que se supone que eran la encarnación de la diosa y, cuando morían, de la diosa y, cuando morían, eran momificados. En Bubastis  se encontró un cementerio con miles de gatos momificados. Además de en Bubastis, de en Bubastis, era venerada también en Menfis (asimilada a Sejmet), Heliópolis (asimilada a Tefnut), Tebas (asimilada a Mut), Leontópolis y Heracleópolis. Sus festivales se celebraban el día 1 del mes de Tybi y el día 1 del mes de Paini. Su culto se difundió también por Italia, donde se han encontrado restos en las ciudades de Roma, Ostia, Nemi y Pompeya.

También cuentan que en sus orígenes, Bastet podría haber sido una leona, y así se la representa en su versión colérica, como una mujer con cabeza de leona. Ésta recibe el nombre de Sejmet (la poderosa), y representa la quemadura de los rayos de sol. Es una diosa destructora de los hombres y responsable de las epidemias que se cernían sobre Egipto. Por esta razón, Sejmet fue elegida como patrona de los médicos.

Fue a partir del siglo X a.C. cuando comienza a representarse como una gata doméstica de carácter hogareño. Cuenta una leyenda egipcia que, al principio de los tiempos, hubo una revuelta de los hombres contra el poder divino. Ra, para castigarlos, les envió a la feroz Sejmet. Pero la leona, sedienta de sangre, pierde el control hasta tal punto que Ra ha de intervenir para que no aniquile a toda la humanidad. Manda fabricar cerveza y ordena que la coloreen de rojo, para que parezca sangre. La cerveza es derramada cerca de donde se halla la diosa, que inmediatamente comienza a beberla. Al final está tan borracha que olvida su furia contra los hombres. Pero, sintiéndose humillada, huye de Egipto y se interna en Nubia (parte del actual Sudán). Para restablecer el orden divino es necesario que Sejmet regrese a Egipto, por lo que Ra envía a Tot con la misión de convencer a la irascible y temible leona. Tot (dios de la escritura y mediador entre los dioses), disfrazado de astuto monito, consigue calmar a Sejmet y que vuelva a Egipto, para lo cual ésta toma la forma de una gata.

Todo este tipo de leyendas tiene una estrecha relación con las crecidas del Nilo, pues éstas venían desde Nubia hacia Egipto (como el viaje de regreso de la diosa). Y además la cerveza roja que calma a la leona es un símil de las aguas del Nilo cuando suben su nivel cargadas del oscuro y nutriente limo. Esta leyenda aparece representada por primera vez en la tumba de Seti I, padre del famoso Ramsés II.

Por tanto, se puede observar que Bastet encarna los aspectos pacíficos de Sejmet. Protege la gestación y los nacimientos, ya que es uno de los ojos de Ra (el que está asociado a la Luna). Por eso a los niños pequeños se les ponía amuletos de Bastet colgados del cuello que les protegía de las enfermedades. Sejmet, sin embargo, era el ojo de Ra asociado al Sol, que representaba las quemaduras solares. A pesar de todo, ambas entran en la categoría de diosas peligrosas, pues sus accesos de ira son tan terribles que hasta el rey de los dioses, Ra, teme permanecer junto a ellas. Es la dualidad del carácter felino, que puede pasar fácilmente del amor más profundo hacia sus hijos a la cólera más enorme por defenderlos contra cualquier ataque externo.


El abisinio y el Mau Egipcio
 son las razas de gatos que
 representan a esta diosa
La dinastía XXII, de origen libio, toma a Bastet como divinidad propia y establece la nueva capital de Egipto en Bubastis, como no podía ser de otro modo. Así que a esta dinastía se la conoce como bubástica o bubastita.

Para mantener contenta a la diosa-gata, solía celebrarse en su ciudad una fiesta denominada La Fiesta de la Embriaguez, con tintes orgiásticos, en la que corría el vino en gran cantidad, pretendiendo con ello aplacar la ira de la diosa para que no tomara su aspecto de leona y arremetiera contra los humanos. Como se puede ver, está muy relacionada con la leyenda de Nubia.


En su templo, los sacerdotes mantenían y adoraban a gatos sagrados considerados la reencarnación de la diosa. Cuando estos gatos morían, se les realizaba el rito de la momificación con todos los honores. Las gentes de Egipto emigraban a esta ciudad cuando sus gatos morían, pues era costumbre enterrarlos en un cementerio en la ciudad de la diosa-gata. En 1859 se encontró allí una necrópolis con unos 300.000 gatos momificados. Sus descubridores convirtieron las momias en polvo para abono, que fue vendido a agricultores ingleses a unas 4 libras la tonelada.
Además de en su capital, Bastet fue adorada en otras ciudades egipcias, como Heliópolis, Menfis o Leontópolis, difundiéndose su culto más tarde a Italia. Este culto duró hasta finales del siglo IV d.C.

Para mi una de las diosas más interesantes de la mitología egipcia junto con Anubis e Isis (de la que hablare en otra entrada). Esta diosa es una de las diosas mas interesantes ademas de las más hermosas. 

Espero que os haya gustado esta nueva entrada.




Muchas Gracias por vuestras visitas y Hasta la próxima ^^

BYE!


miércoles, 4 de septiembre de 2013

Mantícora

La mantícora Se trata de una criatura no demasiado inteligente, pero muy fiera y poderosa. Su cabeza es la de un ser humano, con barba y densa cabellera. Las alas son las de un enorme murciélago, y el resto de su cuerpo es el de un león gigante, con cola rematada en púas de hierro, que pueden ser como la cola de un escorpión que es capaz de disparar espinas venenosas para incapacitar o matar a sus presas. Dependiendo del relato mitológico, su tamaño varía desde el de un león hasta el de un caballo, y su descripción puede incluir o no la presencia de alas y coraza. Puede medir unos 5 metros de largo y hasta 3 de alto. Es un ser carnívoro, y tiene preferencia por la carne humana. Cuando tiene necesidad de comer ataca a sus víctimas mediante un golpe de cola. Una vez debilitadas, son atrapadas por las afiladas garras de la mantícora, que intentará siempre permanecer en el aire para recibir los mínimos daños. Estas criaturas abarcan territorios muy extensos, de unos 50 kilómetros. Se emparejan de por vida, y cuidan de su descendencia. Los cachorros de mantícora no pueden volar hasta que se hacen adultos. Un cachorro puede ser adiestrado con mucho esfuerzo, pero nada garantiza que al ser adultos obedezcan. Una mantícora no permite ser usada como montura. Las mantícoras son seres malvados que a menudo se asocian con otros seres perversos, para obtener una mutua protección. Criatura mitológica de tipo quimera con cabeza humana (frecuentemente con cuernos), el cuerpo rojo (en ocasiones de un león), y la cola de un dragón o escorpión, capaz de disparar espinas venenosas para incapacitar o matar a sus presas. Dependiendo del relato mitológico, su tamaño varía desde el de un león hasta el de un caballo, y su descripción puede incluir o no la presencia de alas.

La mantícora tienen su origen en la mitología persa, y su nombre significa 'devoradora de personas'. Aparentemente, la mantícora entró a la mitología griega a través de Ctesias, un médico griego en la corte del rey Artajerjes II en el siglo IV a.e.c., en su obra Indika ('Historia de la India'), desaparecida en la antigüedad. Aunque algunos estudiosos como Pausanias dudaban de la descripción original de Ctesias y atribuían el origen de la mantícora a una descripción exagerada de tigres indios, Plinio el Viejo consideró esta criatura auténtica y la incluyó en su influyente Naturalis Historia (c. 77). Posteriormente, Claudio Eliano también introdujo a la mantícora en su obra De Natura Animalium (IV; 21), obra utilizada como base para la mayoría de bestiarios europeos durante la Edad Media.


Sinceramente, en mi opinión, de todos los seres sobrenaturales de los que he publicado en el blog, este es el que más feo me parece y el que menos me gusta -jajaja-.


Espero que os haya gustado esta entrada a pesar de la fealdad de este ser ;)


Muchas Gracias por vuestras Visitas y Hasta la próxima

BYE!